Tu Sol en Leo
Leo es un elemento de fuego y destaca, por lo tanto, por su resplandor, su enorme potencial de energía, y su espíritu entusiasta y honesto. El elemento de fuego es radiante, ardiente y expresivo, dedicándose principalmente al descubrimiento y cumplimiento de posibilidades futuras, y nos otorga la energía que necesitamos para llevar a cabo nuestros deberes diarios.
Con el Sol en su propio signo, eres una persona de gran corazón que irradia dignidad y posee un mundo interior lleno de orgullo. Dispones de amor, agradecimiento y lustre en abundancia y quieres dar de ello a otras personas. Vives tus convicciones con plenitud e inviertes en ellas toda la fuerza de tu personalidad.
Como nativa de Leo sientes el simbolismo del Sol como una invitación a convertirte en una representante digna de este astro tan luminoso. A pesar de que Leo posee muchas cualidades positivas, debes aprender a encontrar tu propia naturaleza –tu ser real– independiente del reconocimiento por parte de los demás. En otras palabras: el reto del Leo consiste en encontrarte a tí misma.
Lo más importante para ti es tu pequeño mundo interior. Por consiguiente, te resulta difícil saltar sobre tu propia sombra y aceptar que otras personas sienten o piensan de forma diferente. Con frecuencia no sabes reconocer las necesidades de tu prójimo, ya que Leo –contrario a Libra, Cáncer o Piscis– no es un signo de relación.
Si hay algo que te fastidia es la rutina, y también te vuelves impaciente si las cosas no se mueven a tu ritmo y con la rapidez esperada. No te gusta en absoluto que te critiquen, y te sientes insultada si alguien lo hace, porque no comprendes cómo alguien puede ver fallos en ti. Estás convencida de ti misma y de tus virtudes, y vives del reconocimiento de tu entorno. No es probable que alguien te pase por alto, ya que tu resplandor majestuoso se hace notar. No cabe duda de que tienes nobleza. Cuando recibes la admiración requerida (o merecida), puedes ser muy generosa y compartir tus riquezas con otros. Entonces, recuerdas a una reina de cuento que puede ser muy bondadosa si no está ocupada en luchar contra enemigos malvados y preocupada con preservar su poder.
Pero recuerda que un cuento es un cuento y, tal vez, la realidad exija de ti que desarrolles más humildad y encuentres tu sitio en el mundo –el cual no tiene que estar necesariamente en el centro del escenario –.
Con el Sol en su propio signo, eres una persona de gran corazón que irradia dignidad y posee un mundo interior lleno de orgullo. Dispones de amor, agradecimiento y lustre en abundancia y quieres dar de ello a otras personas. Vives tus convicciones con plenitud e inviertes en ellas toda la fuerza de tu personalidad.
Como nativa de Leo sientes el simbolismo del Sol como una invitación a convertirte en una representante digna de este astro tan luminoso. A pesar de que Leo posee muchas cualidades positivas, debes aprender a encontrar tu propia naturaleza –tu ser real– independiente del reconocimiento por parte de los demás. En otras palabras: el reto del Leo consiste en encontrarte a tí misma.
Lo más importante para ti es tu pequeño mundo interior. Por consiguiente, te resulta difícil saltar sobre tu propia sombra y aceptar que otras personas sienten o piensan de forma diferente. Con frecuencia no sabes reconocer las necesidades de tu prójimo, ya que Leo –contrario a Libra, Cáncer o Piscis– no es un signo de relación.
Si hay algo que te fastidia es la rutina, y también te vuelves impaciente si las cosas no se mueven a tu ritmo y con la rapidez esperada. No te gusta en absoluto que te critiquen, y te sientes insultada si alguien lo hace, porque no comprendes cómo alguien puede ver fallos en ti. Estás convencida de ti misma y de tus virtudes, y vives del reconocimiento de tu entorno. No es probable que alguien te pase por alto, ya que tu resplandor majestuoso se hace notar. No cabe duda de que tienes nobleza. Cuando recibes la admiración requerida (o merecida), puedes ser muy generosa y compartir tus riquezas con otros. Entonces, recuerdas a una reina de cuento que puede ser muy bondadosa si no está ocupada en luchar contra enemigos malvados y preocupada con preservar su poder.
Pero recuerda que un cuento es un cuento y, tal vez, la realidad exija de ti que desarrolles más humildad y encuentres tu sitio en el mundo –el cual no tiene que estar necesariamente en el centro del escenario –.
Tu Luna en Piscis
Piscis es un signo de agua y se comunica con su entorno principalmente por medio de sus sentimientos. El elemento agua representa el mundo de las emociones insondables, desde pasiones compulsivas y temores irracionales hasta sentimientos de compasión y amor universales. Destaca por su intuición y sabe que tiene que protegerse de influencias ajenas para poder tener acceso a las dimensiones más profundas de su ser.
Con la Luna en Piscis, posees una fantasía rica y tiendes a perderte en sueños de un mundo de armonía y paz, olvidando la cruda realidad en que vivimos. De naturaleza intuitiva, sensible, amable y gentil, el mundo es para ti un lugar sagrado, y te dedicas a fondo a las ideas espirituales.
Eres una mujer romántica y algo sentimental, siempre dispuesta a atender a los problemas de los demás, relegando tus propios intereses a un segundo lugar. Debes tener cuidado en no perder la visión de tus prioridades y salir perjudicada. Aprende a pensar en ti misma y a decir «no» de vez en cuando.
Amas todo lo que está relacionado con la música y las artes, y es posible que una carrera artística tuviese éxito en tu vida y te diese mucha satisfacción interna. Eres muy sensible a los fenómenos psíquicos, y posees una fe firme en un poder superior que está guiando tus pasos.
Con la Luna en Piscis, posees una fantasía rica y tiendes a perderte en sueños de un mundo de armonía y paz, olvidando la cruda realidad en que vivimos. De naturaleza intuitiva, sensible, amable y gentil, el mundo es para ti un lugar sagrado, y te dedicas a fondo a las ideas espirituales.
Eres una mujer romántica y algo sentimental, siempre dispuesta a atender a los problemas de los demás, relegando tus propios intereses a un segundo lugar. Debes tener cuidado en no perder la visión de tus prioridades y salir perjudicada. Aprende a pensar en ti misma y a decir «no» de vez en cuando.
Amas todo lo que está relacionado con la música y las artes, y es posible que una carrera artística tuviese éxito en tu vida y te diese mucha satisfacción interna. Eres muy sensible a los fenómenos psíquicos, y posees una fe firme en un poder superior que está guiando tus pasos.
Tu Ascendente en Escorpio
El elemento del Ascendente revela la cualidad de energía que vitaliza nuestro cuerpo, y también indica nuestro modo de acercarnos a la vida. Los signos de agua (Cáncer, Escorpio y Piscis) tienden a conservar las energías vitales y vivir más en el interior. Se sienten fácilmente influenciados por el ambiente y otra gente. Son muy sensibles y defensivos debido a un fuerte sentido de vulnerabilidad. Por el otro lado, el Ascendente en agua les hace sentir inmediatamente, y con fuerza, las emociones de los demás. Tienen el innato deseo a ayudar y proteger a las criaturas necesitadas.
Con Escorpio ascendiendo, te preocupan las cuestiones esenciales de la existencia, en particular las referentes a la vida, la muerte y la sexualidad, y tratas de penetrar profundamente es su misterio. Vives la vida con intensidad, lo cual se transmite a tu entorno, y la mayoría de la gente que llega a conocerte se siente atraída a estar en tu presencia. Tus ojos dan testimonio de tu magnetismo, tanto al nivel psíquico como físico. Tiendes a establecer relaciones estables y duraderas, y tus compañeros a menudo tienen dinero, propiedades y tienden a ser posesivos respecto de tu atención. Tus emociones operan en profundidad y puedes esconder unos celos feroces (y a menudo indebidos). Ocultas tu yo en las relaciones. Sólo tu amante conoce cuan vulnerable eres en realidad. No es fácil desviarte del camino que te has trazado. Tus afectos y aversiones son espontáneos, intensos e irreductibles. Sabes amar con pasión, pero tu aversión puede ser igualmente intensa.
Tu espíritu realista tiende más a los hechos que a las teorías, y siempre te expresas sin rodeos y con cierta ironía. Existe en ti una doble tendencia: por una parte, un impulso a alcanzar cimas elevadas, a la investigación científica y a la «gloria», y por otra parte, instintos básicos que te pueden hacer celosa y vengativa, con un espíritu combativo y revolucionario utilizando medios extremistas. Posees una capacidad de trabajo excepcional, y no te frena ninguna dificultad, ningún esfuerzo. Intentas siempre controlar tus impulsos y mantener un dominio sobre ti misma; estás en perpetua lucha con el aspecto inferior de tu naturaleza. Tienes miedo a soltarte y perder el control. Tu voluntad es tan potente que casi siempre consigues realizar tus deseos y llegar a la meta marcada.
Con Escorpio ascendiendo, te preocupan las cuestiones esenciales de la existencia, en particular las referentes a la vida, la muerte y la sexualidad, y tratas de penetrar profundamente es su misterio. Vives la vida con intensidad, lo cual se transmite a tu entorno, y la mayoría de la gente que llega a conocerte se siente atraída a estar en tu presencia. Tus ojos dan testimonio de tu magnetismo, tanto al nivel psíquico como físico. Tiendes a establecer relaciones estables y duraderas, y tus compañeros a menudo tienen dinero, propiedades y tienden a ser posesivos respecto de tu atención. Tus emociones operan en profundidad y puedes esconder unos celos feroces (y a menudo indebidos). Ocultas tu yo en las relaciones. Sólo tu amante conoce cuan vulnerable eres en realidad. No es fácil desviarte del camino que te has trazado. Tus afectos y aversiones son espontáneos, intensos e irreductibles. Sabes amar con pasión, pero tu aversión puede ser igualmente intensa.
Tu espíritu realista tiende más a los hechos que a las teorías, y siempre te expresas sin rodeos y con cierta ironía. Existe en ti una doble tendencia: por una parte, un impulso a alcanzar cimas elevadas, a la investigación científica y a la «gloria», y por otra parte, instintos básicos que te pueden hacer celosa y vengativa, con un espíritu combativo y revolucionario utilizando medios extremistas. Posees una capacidad de trabajo excepcional, y no te frena ninguna dificultad, ningún esfuerzo. Intentas siempre controlar tus impulsos y mantener un dominio sobre ti misma; estás en perpetua lucha con el aspecto inferior de tu naturaleza. Tienes miedo a soltarte y perder el control. Tu voluntad es tan potente que casi siempre consigues realizar tus deseos y llegar a la meta marcada.